Con el estallido de la sublevación del 18 de julio de 1936, la localidad jienense de Lopera se vio totalmente inmersa en los movimientos que se viven en todo el país, y si bien en los primeros días la rebelión militar fracaso, finalmente las calles fueron tomadas por la milicia popular, que se adueña totalmente de la situación hasta el dia de navidad de 1936.
En la jornada del 27 de diciembre, desde las 4 de la mañana hasta las 11 de la noche, la aviación franquista, en misión exploradora, deja caer su mortífera carga mientras dispone sus ametralladoras frente la columna de la compañía inglesa que marcha a la cabeza de la brigada, que si bien consigue llegar a las primeras casas del pueblo, es obligada a retroceder hasta consolidarse en una línea más alejada excavando numerosos refugios entre los olivos, avanzando y retrocediendo para volver a atacar, produciéndose un desbarajuste que desorganizo a las compañías que se dispersaron mezclándose las unas con las otras hasta perder el enlace con sus respectivos comandantes, encontrándose al final de la jornada sin fuerzas y sin municiones.
Mientras tanto, en la zona nacional, ante la férrea resistencia republicana, sus efectivos también se habían visto considerablemente mermados, por lo que Mola envía desde Villa del Rio numerosos refuerzos integrados por dos batallones más otros dos escuadrones y una batería, todos al mando del teniente coronel Eduardo Álvarez con la consigna de atacar el flanco derecho de las Brigadas Internacionales situadas al norte de Lopera, iniciándose durante la madrugada del 28 de diciembre un ataque republicano que se prolongaría durante toda la jornada, saldándose con un desastre de grandes dimensiones, que supondría unas perdidas cerca de 1000 combatientes y más de medio millar de huidos en desbandada, para finalmente, en el mes de agosto de 1937, otro intento republicano de reconquistar Lopera producido al amanecer, llego incluso a ocupar media población, pero la ofensiva fracaso por la mañana, quedando Lopera hasta el final de la guerra en el bando de Franco.
El jefe del 12 batallón de la XIV Brigada Internacional capitán Delessalle, fue arrestado por sus propios compañeros, siendo juzgado unos días después en Arjonilla por un Tribunal Militar que le acuso de alta traición, siendo fusilado en un intento por parte republicana de justificar las enormes pérdidas humanas registradas en la operación.
Lopera es un municipio perteneciente a la provincia de Jaén en La Comunidad Autónoma de Andalucía, perteneciente a la zona denominada Campiña Baja, a 54 Km. de la capital.
Empezamos la visita por El Castillo-Fortaleza perteneciente a la Orden de Calatrava con sus cinco Torreones, y las Torres de Santa María y San Miguel rodeadas por un recinto amurallado, el Monumento a Los Brigadistas, único en España construido para conmemorar las bajas de Las Brigadas Internacionales en La Guerra Civil Española, asi como El Ayuntamiento, La Casa del Pueblo, instalada en un antiguo convento y la de la Tercia o Pósito, comunicada con el Castillo a través de un pasadizo subterráneo, siguiendo por el Hospital de San Juan de Dios y el de Jesús Nazareno, en cuyos alrededores se pueden ver numerosas casas nobiliarias, destacando La Casa Palacio de Bartolome Valenzuela, hoy residencia de ancianos, asi como las ermitas de Jesús, San Roque, Cristo del Humilladero y San Isidro, terminando por los Baluartes de La Guerra Civil Española, tanto dentro de la ciudad, como en el Puente Arroyo Salado (2,5 Km), Pagos de Valcargdo (5) o el Cerro de Las Esperillas.
Terminada la visita a la población y el recorrido por los bunkers citados, proponemos proseguir el recorrido por una ruta diseñada según tu conveniencia por las poblaciones de Porcuna, a 12 Km., Arjonilla (14), Arjona (17), Marmolejo (22), Torredonjimeno (35), *Jaén*, la capital (54), Los Villares (55), Andújar (56), Guarroman (60), Linares (63), Alcaudete (64), Mancharreal (73), La Carolina (74), Baeza (81), Vilches (83), Cambil (87), Alcalá la Real (88) o Úbeda, situada a 89 Km. de Lopera.