1811 SITIO DE TARRAGONA  (Al sur de Cataluña )

Después de recibir la orden de Napoleón de iniciar el sitio de Tarragona, Suchet, una vez tomadas todas las medidas para asegurar su retaguardia por la parte de Aragón y Lérida, procedía el 2 de mayo a formalizar el sitio encargado al mando de una fuerza de 20000 hombres, dejando en Reus provisiones de boca y de guerra en abundancia.

El sitio, que se prolongaría durante unos interminables treinta días, en los que fracasaron cuantos intentos realizo el francés por resolver la situación, incluso el de cortar el acueducto moderno, que abastecía de agua a la ciudad, a lo que los somatenes catalanes respondieron con unas cortaduras más arriba, sucediendo que como aquellas aguas, necesarias también para el abastecimiento de los sitiadores, venían de Pont de Armentera, a unas seis leguas de distancia, Suchet tuvo que emplear a sus tropas para reparar el estrago.

Después de varias salidas victoriosas contra las tropas sitiadoras, respondidas por los franceses con la toma de la Cuneta del Príncipe y los baluartes de Orleans y San Carlos, Suchet, sabedor de la llegada de las tropas inglesas, a las cinco de la tarde dispuso el asalto final ,penetrando por las brechas abiertas en la muralla donde son rechazados por los españoles, que una y otra vez desbarataron cuantos intentos realizo el ejército francés, llegando al extremo de tener que formar, para estimulo de las desmoralizadas tropas, un batallón de oficiales al mando de los ayudantes del mismo mariscal.

Finalmente, y debido a la enorme diferencia de los efectivos disponibles, furibundo el francés, penetro por todas partes y pillo, quemo, mato, violo y rego de sangre las calles y edificios de Tarragona, pereciendo en su defensa más de 4000 personas del vecindario, estimándose en 7000 las pérdidas de los franceses durante el ataque, mientras Suchet, bajo palio y a pie, agradecía en la iglesia de Reus al Todopoderoso el triunfo concedido con la toma de Tarragona.

Difundida en Cataluña la perdida de la plaza, el desánimo se apodero de las fuerzas españolas, sustanciándose en una importante deserción en el ejército, dado que los catalanes que en él había preferían la guerra de somatenes a la tropa reglada, poniendo además más confianza en sus propios jefes que en los forasteros actualmente al mando.

Tarragona es un municipio de España, capital de la comarca y la provincia del mismo nombre, ubicada a la orilla del Mediterráneo en la llamada Costa Dorada, dentro de La Comunidad Autónoma de Cataluña, cuyo origen se remonta a la antigua Tarraco romana, capital de la Hispania Citerior.

Su casco antiguo conocido como Parte Alta, coincidente con el primer asentamiento romano, está ocupado en su mayor parte por El Fórum Provincial de Tarraco, del que forma parte la llamada Torre del Pretorio, rodeado por La Muralla Romana, uno de los monumentos más visitados de la que solo se conserva hoy alrededor de un kilómetro, siguiendo la ruta por el gran Torreón Romano de la Antigua Audiencia, el Anfiteatro de Tarraco, en cuyo interior se conservan los restos de la basílica visigótica de San Fructuoso y de la iglesia de Santa María del Miracle, sin perdernos también El Circo Romano de Tarraco, el Tarraco Arena Plaza y El Mercado Central de la ciudad, edificio modernista de 1915.

Siguiendo con el recorrido por la ciudad resulta imprescindible la visita a La Catedral de Tarragona, al Portal de San Antonio (puerta de la Muralla), al Puerto con su museo y al barrio de pescadores del Serrallo, sin olvidar un recorrido por sus interesantes museos como los de El Diocesano, Casa de La Festa, Paleocristianos, Arqueológico o El Bíblico, asi como El Teatro Metrópoli y el de Tarragona, para después girar un relajante recorrido por La Rambla Nova, majestuoso paseo centro de la vida ciudadana que guarda en su interior los monumentos a Los Castellers, y a “Los Héroes de 1811”, asi como ya en su final encontramos El Balcón del Mediterráneo, desde donde se divisa una majestuosa panorámica de la ciudad, terminando, ya fuera del núcleo urbano, con las visitas a La Torre d los Escipiones y a La Cantera del Medol, a 6 y 7 km respectivamente de la capital, para seguir a continuación, si se dispone de tiempo suficiente, por una ruta que tú mismo puedes confeccionar y que ofrece una buena cantidad de pueblos con encanto dentro de la provincia como Tamarit a 13 Km., Altafulla (15), Santos Creus (31), Montblanc (36), Pratdip (41), Ciurana (52), Baja (57), Prades (59, Santa Coloma de Queralt (63), Miravet (66), y La Galera a 99 Km. de la capital.