1809  TALAVERA (En la provincia de Toledo)

Una vez expulsado el ejército de Soult de Portugal, Welesley acude a petición de la Junta de Defensa Española para colaborar en la lucha contra las tropas napoleónicas del mariscal Víctor concentradas en la ciudad de Madrid, pero la relación de Welesley con el general Cuesta para establecer un plan de acción común no resulta todo lo fructífera que ambos hubieran deseado, ya que entre ellos pronto surgirían numerosos desacuerdos en la forma de llevar a cabo los movimientos de tropas, pese a lo cual, tras lograr un mínimo consenso, el 20 de julio reúnen sus ejércitos en Oropesa, a unos 40 km. al oeste de Talavera de la Reina, mientras en el otro lado, el mariscal Víctor traslada a sus hombres hasta esta población, hacia donde el rey José, al mando de la mayor parte del ejercito de Madrid se dirige también, agregándose a la concentración las tropas del general Sebastiani, que observaba los movimientos del español Venegas por la Mancha.

Posicionado el ejército aliado a unos kilómetros al oeste del rio Alberche, el dia27 de julio las tropas francesas de Víctor, sin esperar la llegada de los hombres de José I y Sebastiani, atravesaron el rio para pillar por sorpresa a la desprevenida a la brigada inglesa, con la que se encontraba el propio Welesley, que a punto estuvo de caer prisionero, salvándose a última hora al conseguir subir a un caballo y huir toda prisa.

Entre tanto, dado el resultado de su primer escarceo y sin importarle lo avanzado del dia, a las 22 horas Víctor lanza a la división de Ruffin contra la posición francesa del Cerro de Medellín, donde el ataque, realizado a la bayoneta calada por las empinadas pendientes del terreno, expulsa a los ingleses de las alturas que serían reconquistadas posteriormente por Gill en un brillante contraataque.

Visto el escaso éxito del ataque, José Bonaparte reunido con Víctor, Sebastiani y Jourdán, después de saber que Soult no llegaría hasta primeros de agosto y que Venegas avanzaba hacia Toledo y Aranjuez con el ejercito de La Mancha, opta por seguir el criterio de Víctor y continuar la batalla, y en vista de la poca eficacia de los pequeños cañones que se encontraban en la cercana colina del Cascajar, Jourdán ordena el ataque de la infantería francesa, que tras una agotadora lucha, sostenida fundamentalmente sin la intervención del regimiento al mando de William Guarel, el ejército francés es expulsado de sus posiciones dejando tras de sí un gran número de bajas, cifradas en unas 7000 en el bando francés, 5000 en el inglés y unas 1200 en el español, para observar con sorpresa en el amanecer del 29 de julio, que el ejército francés se había retirado dejándolos solos en el campo de batalla.

A pesar de la victoria y desoyendo la opinión de Cuesta de atacar a los franceses replegados ahora en Cazalegas, Wellesley, en vista de la inminente llegada de Soult y temeroso de verse aislado de su base de operaciones en Portugal, se decanta el 4 de agosto por una rápida retirada por Extremadura hacia la frontera, encargando a las tropas españolas la misión de proteger su retaguardia, dejando abandonada a su suerte a la ciudad.

Talavera de La Reina en un municipio enclavado en el occidente de la provincia de Toledo en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, siendo el rio Tajo, que fragmenta en dos a la ciudad, su elemento más característico, para una vez recorridas las márgenes del Arroyo de la Portiña y los cerros de Cascajal y de Medellín, parajes donde sucedió la batalla, ya en la Poblacion empezaremos por citar, sin ningún orden establecido, los numerosos puentes que cruzan sobre el rio, empezando por el Puente Viejo de Santa Catalina, el Puente de Hierro de 1904, hoy Reina Sofía, el del Príncipe Felipe, el de Castilla–La Mancha de 4Km. de longitud, además del Puente Viejo del rio Alberche del siglo XV, y el del Arroyo Barrago, más bien “pontón” del siglo XVI, situación que se repite en el caso de los edificios de culto, que comienzo a enumerarte por La Basílica de Nuestra Señora del Prado, las capillas de La Cárcel de la Santa Hermandad, y la del Cristo de las Mercedes, además de La Colegiata de Santa María la Mayor, y las iglesias Del Salvador, de San Andrés, San Francisco, Santiago el Nuevo, y la del Hospital de La Orden de Santiago, amén de los conventos de La Encarnación de las Madres Bernardas, de Las Madres Carmelitas, San Agustín el Viejo, Santo Domingo, o los monasterios de San Benito y Santa Catalina, asi como la Casa del Arcipreste y la del Deán, para ya a continuación, comenzar con la arquitectura civil, visitando la antigua Casa Consistorial del siglo XVI y el nuevo Ayuntamiento, complejo palaciego con patio porticado del siglo XVIII para continuar por La Casa-Palacio de la Calle del Sol, la Casa de La Panadería, la de Los Molinos Nuevos, uno de los principales edificios de la Fabrica Real de Sedas del siglo XVIII, y el antiguo Hospital de La Misericordia, con los restos de los siglos I-IV, el Palacio de los Marqueses de Villatoya, el de los Condes de la Oliva, La Villa Romana de Saucedo y la Plaza de Toros de La Caprichosa, donde “cambiar de tercio” por La Huerta de San Agustín, alcazaba árabe construida por Abderramán III, La Muralla y Las Torres Albarranas, que fueron parte del primer recinto amurallado y que encierran el barrio más antiguo de la ciudad, siguiendo por el segundo recinto, que comprende los Arrabales Nuevos, y de la que solo quedan algunos restos como La Puerta de Sevilla, la Torre del Polvorín y los torreones de La Puerta de Zamora y el de La Plaza de San Miguel, para desintoxicarse de tanta piedra y cemento por los Jardines del Prado, los parques de La Alameda, Los Sifones, El Vivero, Tierno Galván o el Parque Lineal del Tajo, que se extiende a lo largo de la margen derecha del rio.

Ya fuera del municipio, te propongo conocer unos cuantos lugares hasta acercarte a la capital como Real de San Vicente a 27 Km., Oropesa (37), Puente del Arzobispo (37), Maqueda (43), Puebla de Montalbán (47), Burujón (53), Escalona (56) y Toledo a 80 Km. que por supuesto tienes que visitar.