Una vez roto el bloqueo de Barcelona (17-12-1808) por parte de las tropas francesas del general Laurent Gouvion Saint-Cyr , este decide lanzar un nuevo ataque contra los españoles que se habían reagrupado en la denominada Línea del Llobregat, donde Palleja tenía situada su ala izquierda, ocupando el centro de los efectivos los cerros de San Vicente de la Horst y el ala derecha en Santa Coloma de Corvella, mientras también se vigilaban los vados de San Feliu y San Juan Despi con un potencial total de unos 18000 hombres provenientes de los efectivos que el conde de Cadalges había retirado del bloqueo de la ciudad de Barcelona y de unos 600 supervivientes de la batalla de Llinars Cardedeu además de numerosa artillería.
Sin dar tiempo a que el enemigo de reorganizase, las tropas de Saint-Cyr se desplegaron en la orilla izquierda del Llobregat con Molins de Rey a la derecha, y forzando el paso del rio por los vados, desbordó el flanco izquierdo y la retaguardia española, resultando inútiles los intentos que se hicieron por variar el frente hacia el sur, por lo que dando la batalla por perdida y viendo peligrar la retirada hacia Tarragona, los españoles se dieron a la fuga por Corbera de Llobregat en una desbandada general sometida a un acoso continuo durante más de quince horas.
Esta derrota junto con la que acababa de suceder en Cardedeu produciría grandes disturbios en Lérida y Tarragona, que se saldaron con la destitución del general Vives del mando del ejército del Principado, siendo sustituido por el general Reding que inicio la reorganización de las fuerzas restantes en Tarragona.
Molins de Rei es un municipio de Cataluña perteneciente a la provincia de Barcelona enclavado en la comarca del Bajo Llobregat, y actualmente parte del área metropolitana de Barcelona.
La localidad de encuentra atravesada por el rio Llobregat sobre el que antiguamente se levantaba un puente de 15 ojos que acabo por hundirse debido a las continuas extracciones de áridos en el fondo del rio, siguiendo la misma suerte el castillo de Castellciuró, del que solo quedan algunos restos de lo que fue, si bien continua en pie para visitar la Capilla de San Pedro de Romaní, asistiendo si la visita coincide con las fechas de su programación a la celebración del Festival de Cine de Terror, nacido en 1973 y que en los últimos años ha cobrado un importante auge, sin contar el recorrido por la bellísima Ciudad Condal.
Terminada la extenuante visita a la capital, si todavía quedan tiempo y ganas, otros pueblos a visitar no lejos de Barcelona pueden ser Santa Coloma de Cervello a 20 Km, Sitges (42), Mura (56), San Pol de Mar (60), Vic (70), o Cardona a 96 Km.