Si bien en el transcurso de la Guerra de la Independencia se van sucediendo éxitos y derrotas, es en Andalucía donde los ejércitos imperiales van a encontrar su fracaso más espectacular. En Bailen, el 19 de junio de 1808, el general Pierre Dupont capitulo ante el español Castaños con la frase, autentica o no, de “Aquí os entrego mi espada vencedora en cien batallas” a lo que el español contesto escueto “Pues esta es la primera que yo gano”. En efecto, fue la primera batalla perdida por las tropas imperiales, y la primera y también la última ganada por el ejército regular español, pues en adelante, la contienda quedaría en manos de los ingleses y los imprevisibles guerrilleros.
El triunfo de Castaños, significo para los españoles el hecho de que el reinado de José Bonaparte no durase más allá de 10 días, además como consecuencia de la victoria, Inglaterra, tras anunciar que ya no estaba en guerra con España, enviara una expedición al mando de sir Arthur Wellesley, que tras desembarcar en La Coruña, paso a Portugal donde derroto al mariscal Junot (30 de agosto), a quien impuso la firma de una convención por la cual el ejército francés abandonaba Portugal, y para más humillación de los derrotados, estos fueron devueltos a Francia a bordo de buques ingleses.
Estos acontecimientos decidieron a Napoleón a venir a España en noviembre de 1808 a fin de reorganizar personalmente la situación, pero ya era demasiado tarde; los problemas europeos obligaron al emperador a abandonar precipitadamente la Península sin haberla conquistado realmente.
Bailen es un municipio español perteneciente a la provincia de Jaén en la Comunidad Autónoma de Andalucía ubicado en la comarca de Sierra Morena, paso natural de las vías de comunicación que enlazan el centro y el norte de la península.
Después de ojear el lugar de los hechos en la proximidad de la población, iniciamos la visita a la villa por la Plaza de la Constitución y el Ayuntamiento, continuando por las iglesias de la Encarnación, edificio del siglo XVI, la Parroquia Del Salvador, asi como las ermitas de Nuestro Padre Jesús del siglo XVIII y la de La Limpia y Pura, datada en el siglo XV, siguiendo por el Museo de la Batalla de Bailen y el de Las Palmeras, sin olvidar los monumentos dedicados al General Castaños, al General San Martin, a María Bellido, heroína local que con jarras de agua apago la sed de las tropas españolas en aquel dia tórrido, y el conmemorativo de la batalla, terminando por La Huerta de San Lorenzo con su noria que actuó de división entre los dos bandos y los parques de Eduardo Carvajal y Del Monumento.
Fuera ya del núcleo urbano, podemos realizar un recorrido, a diseñar por el viajero, a través de las poblaciones de Jaén, a 37 Km, y desde allí, previa visita a la capital, seguir por La Guardia de Jaén (12), Martos (23), Baeza (49), Jodar (56), Úbeda (57), Sabiote (65), La Carolina (66), Alcalá la Real (70), Iznatoraf (94) y Cazorla, a 99 Km. de la capital.